En los últimos años, el pádel ha experimentado un aumento espectacular en su popularidad a nivel mundial. Este deporte de raqueta, que combina elementos del tenis y el squash, ha conquistado a aficionados de todas las edades y niveles de habilidad. Su crecimiento se debe a varios factores, entre ellos su fácil accesibilidad y su carácter inclusivo, ya que puede ser practicado por personas de diferentes niveles físicos y técnicos. Además, la proliferación de clubes y pistas de pádel en ciudades y comunidades ha contribuido a su difusión. La dinámica de juego rápida y emocionante, así como el aspecto social y la posibilidad de jugar en parejas, han convertido al pádel en la elección preferida de muchos entusiastas del deporte. Con este aumento continuo de la popularidad, el pádel se posiciona como uno de los deportes de raqueta más destacados y prometedores en el panorama deportivo actual.